Los muertos forman atasco en el tercer cinturón.
Llevan flores de plástico con gafas negras.
Van cómodos en coche climatizado,
disfrazados de sustancias tóxicas.
Tienen pesadumbres de ocasión,
esperando el turno de semáforo.
Todos a una: vamos hoy,
para dedicar el resto del puente
a nuestros juegos de muertos.
Las cruces se entristecen
de ver tantos muertos que caminan
sobre suelos de cielo.
Llantos de fiesta indigesta,
los muertos regresan en sus coches
cae la noche y les espera
la costumbre de mañana.
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