...Y el señor descendió de las alturas
y dijo a los bancos: "Prestaos los unos a los otros"
y dijo a los políticos: "Colocaos los unos a los otros"
y dijo a los futbolistas de primera: "Os crearé a mi imagen y semejanza"
y dijo a los inmigrantes: "Vosotros sois la sal de la tierra"
y dijo a su padre: "¿Padre: Por qué me haces decir estas cosas?"
y el Padre envió lluvia donde había inundación
envió sol donde había sequía
y envió a otros destructores de la naturaleza
tan poderosos como él
y tan humanos como yo.
y dijo a los bancos: "Prestaos los unos a los otros"
y dijo a los políticos: "Colocaos los unos a los otros"
y dijo a los futbolistas de primera: "Os crearé a mi imagen y semejanza"
y dijo a los inmigrantes: "Vosotros sois la sal de la tierra"
y dijo a su padre: "¿Padre: Por qué me haces decir estas cosas?"
y el Padre envió lluvia donde había inundación
envió sol donde había sequía
y envió a otros destructores de la naturaleza
tan poderosos como él
y tan humanos como yo.
2 comentarios:
hola, estoy muy de acuerdo con esas palabras...aunque los inmigrantes son para mí más que la sal para la tierra el azúcar para nuestras culturas.
Maravilloso texto que alude a traficantes de vida y de sueños.
Saludos
Muy cierto y real...
Saludos azules desde mis horizontes grana, que lo esperan...
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